La resaca de la recién terminada Eurocopa de fútbol todavía se deja sentir en Croacia.
Al parecer la UEFA procederá a sancionar con dureza a la Federación Croata de Fútbol por el comportamiento de sus hinchas en el transcurso del torneo,especialmente en el partido contra Turquía donde se realizaron cánticos racistas y se exhibieron todo tipo de simbolos nazis y fascistas.Así que para los croatas la Eurocopa acaba igual que como empezó,con un escándalo relacionado con el permanente y continuo revival neo-fascista.
Hace dos años la FIFA sancionó a esta misma Federación por unos hechos parecidos cuando un grupo de hinchas realizó una esvástica humana en el campo del Livorno (Italia)
También hay que reseñar que este tema no es exclusivo por desgracia del país croata sino que se hace extensible a todo Europa.
En el caso concreto que nos ocupa va mas allá pues supone un nuevo toque de atención y ya van varios en poco tiempo,señal de que Europa empieza a estar harta ya de este tipo de cosas que hasta hace poco tiempo había tolerado.Pero claro Croacia está apunto de entrar en la UE y no es de recibo acojer en el seno de la Unión a un socio que permite este fenómeno que supera ampliamente los limites de lo moralmente aceptable.
El primer ministro Ivo Sanader reconoció hace apenas unas semanas a raíz del polémico concierto de Thompson Perkovic en Zagreb que todo esto estaba dañando la imagen del país.
Sólo queda esperar por tanto que la autoridades comiencen a atajar el problema con contundencia y sin ambiguedades,con la contradicción que supone tener que hacer de bombero en un incendio que uno mismo ha provocado,y es que no debe resultar nada cómodo mostrarse ahora represivos con un fenómeno que ellos mismos han jaleado y promovido todos estos años.
Hay demasiado en juego y ahora toca contentar a Europa
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